Los mercadillos, a día de hoy, son un punto de atracción turística en el mundo, pues en ellos se ofrecen productos tradicionales del lugar o se consiguen artículos a precios muy asequibles.
Un ejemplo de ellos es el mercadillo de La Villa de Teguise.
Este es el más grande y antiguo de Lanzarote y está situado en un pueblo que destaca por su gran historia y arquitectura.
Cada domingo son muchos los visitantes que se sienten atraídos tanto por el mercadillo como por el lugar en el que este se desarrolla.
Actualmente en él se ofrece una gran variedad de artículos, entre los que se encuentran productos artesanales presentados en un modelo de puestos que no se diferencia adecuadamente del resto de vendedores. Por ello, tras analizar la opinión de visitantes y artesanos, en este trabajo se presentan una serie de propuestas para actualizar la imagen de la plaza de la artesanía y lograr de este modo convertir la misma en un producto turístico.